El otro día escribiendo un post en mi página de Facebook https://www.facebook.com/monxmonchannel tuve un flash espontáneo, sobre un tema que os quería comentar. De eso trata la entrada de hoy en el blog, vamos a ello:
De unos años a esta parte y debido a los cambios sociales en la estructura clásica familiar (donde hemos pasado de familias con muchos miembros a familias con un solo hijo o las cada vez más numerosas personas singles), el mercado se ha adaptado ofreciendo piezas de fruta que son demasiado grandes, como pueden ser la sandía, el melón o la piña, en mitades o cuartos.
¿Os habéis fijado como preparan esas partes? En las grandes superficies no podemos ver las condiciones higiénicas de las salas donde trocean las frutas, habrá que imaginárselo. Sin embargo, yo he podido ver en fruterías convencionales cómo cortan la sandía con el mismo cuchillo con el que cortan las hojas sobrantes de los puerros o cualquier otra cosa. Un cuchillo que va rodando por el mostrador, por encima de cajas y hasta por el suelo. Por no hablar de que, entre que cortan la fruta y la envuelven en papel film, muchas veces quedan durante largos minutos expuestos a indeseables insectos voladores y a la respiración, estornudos o toses de personas que andan por allí.
Llamadme escrupulosa si queréis, pero a mi me da mucho asquito pensar que alguien ha estornudado o tosido sobre algo que me voy a comer. Salvo en los restaurantes, claro está, donde se pre-supone que se cumplen las normas exigidas a los manipuladores de alimentos.
Como tanto una pieza de sandía como de melón es excesivo para el consumo que tenemos en casa, siempre opto por comprar una mitad.
Para quedarme tranquila lo que hago antes de comérmelo es quitarle la primera capa y desecharla. Suelo quitar unos dos milímetros aproximadamente. No sé si será suficiente para evitar bacterias pero al menos me tranquiliza.
Para quedarme tranquila lo que hago antes de comérmelo es quitarle la primera capa y desecharla. Suelo quitar unos dos milímetros aproximadamente. No sé si será suficiente para evitar bacterias pero al menos me tranquiliza.
Quién sabe si eso me ha librado de coger alguna gastroenteritis. No olvidemos que esta infección de los intestinos se transmite por contagio viral, pero también por bacterias y parásitos.
Esto es lo que dicen los profesionales al respecto:
Esto es lo que dicen los profesionales al respecto:
"La gastroenteritis (infección gastrointestinal) es una
inflamación de la mucosa del estómago y del intestino delgado y grueso que suele
cursar con diarrea y vómitos. En España, los agentes etiológicos de enfermedades
diarreicas más frecuentes son, sobre todo, los virus y, más raramente, también
son producidos por bacterias y parásitos.
La gastroenteritis se transmite casi siempre mediante una infección
por contacto: los agentes patógenos llegan a los objetos y superficies
desde las deposiciones y los vómitos del enfermo. Desde allí, en caso de falta
de higiene, los patógenos pueden llegar hasta la boca de otra persona a través
de las manos y, por consiguiente, también hasta su estómago y su intestino, lo
que daría lugar al contagio. Los médicos denominan a esta forma de contagio como
transmisión fecal-oral. Debido principalmente a las malas
condiciones higiénicas, como sucede en los países en vías de desarrollo, los
agentes patógenos de las gastroenteritis también se suelen transmitir por el
agua potable o los alimentos contaminados por los gérmenes o sus toxinas."
(Fuente: onmeda.es)
Yo creo que toda precaución es poca cuando de salud se trata. Así que no dejemos de aplicar las medidas de higiene que tengamos a nuestro alcance.
¡Hasta la próxima!
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